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El seno o antro maxilar es una de las estructuras anatómicas que conforman los senos paranasales de las personas, unas cavidades que se encuentran en algunos huesos del cráneo y la cara, con la función principal de aligerar el peso de los mismos, calentar y humedecer el aire inhalado, secretar moco, servir de caja de resonancia de la voz y expulsar o desechar cualquier cuerpo extraño que penetre al organismo durante la respiración. Los senos paranasales son los “filtros” del aire que respiramos.
El seno maxilar se localiza en la porción posterior del hueso maxilar, a cada lado de las fosas nasales y por debajo de la órbita ocular. Como tenemos 2 huesos maxilares (uno derecho y uno izquierdo), tenemos 2 senos maxilares.
Desde el punto de vista dental, su importancia radica en el hecho de que ocupan gran parte del hueso maxilar, y al ser cavidades vacías y sin hueso, muchas veces impiden o limitan la colocación de implantes dentales a nivel de molares y premolares (dientes posteriores) superiores.
En condiciones normales, generalmente no hay inconvenientes, ya que suele haber un espesor de hueso de más de 10 mm entre el seno y la cavidad bucal, espacio y tejido suficiente para fijar con éxito un implante dental.
Los problemas se presentan cuando el paciente pierde los dientes de la zona y deja pasar mucho tiempo antes de tomar la decisión de optar por implantes dentales. Al no haber dientes, los senos maxilares tienden a agrandarse, descender y ocupar poco a poco la mayor parte del reborde residual donde estaban los dientes naturales, y donde se deben colocar los implantes dentales. Este fenómeno de descenso sinusal y pérdida de hueso es relativamente normal y frecuente después de la pérdida o extracción dental, y se conoce con el término de neumatización.
Si ello ocurre, es entonces necesario rellenar de hueso una parte del seno maxilar, para así lograr que los implantes queden firmes, bien anclados y cubiertos completamente por tejido óseo.
¿Cómo Es el Procedimiento Quirúrgico?
La elevación del seno maxilar es una técnica quirúrgica que se realiza, como dijimos, para el tratamiento con implantes oseointegrados del maxilar superior cuando no existe una buena disponibilidad de hueso.
Es en esencia una intervención muy delicada, y que a nuestro criterio, solo debería ser ejecutada por Especialistas en Cirugía Bucal o Maxilofacial. Básicamente consistente en acceder al piso del seno maxilar para separar su membrana, elevarla y colocar un material de injerto osteoinductor debajo de ella; para mantenerla en posición, estimular la formación de nuevo hueso y poder insertar los implantes sin invadir el antro paranasal.
Cuando la altura del hueso residual es de entre 5 y 8 mm de altura, se recomienda la inserción de los implantes de forma simultánea a la realización de la elevación del seno maxilar y a la utilización de biomateriales, ya que en esta situación clínica se consigue una buena estabilidad primaria de los implantes.
Cuando la altura disponible de hueso es menor de 5 mm, se recomienda esperar como mínimo 6 meses para la inserción de los implantes, después de haber elevado el seno maxilar y colocado injertos óseos y/o biomateriales de relleno.
Independientemente de la técnica a emplear, el aspecto más importante de este tipo de cirugía es el de conservar la integridad de la membrana sinusal. La membrana de Schneider o membrana sinusal, es una fina capa de células, de un grosor de entre 0.3 y 0.8 mm, que se encuentra situada revistiendo el interior de toda la cavidad sinusal.
Si esta membrana se perfora o desgarra durante la cirugía, se pondría en riesgo toda la intervención, ya que las probabilidades de infecciones, sinusitis y rechazo del material colocado; serían muy altas, a pesar de la prescripción de potentes antibióticos.
Técnica Directa o Lateral Para la Elevación del Seno Maxilar
La técnica clásica o de ventana lateral (acceso de Cadwell-Luc) consiste en realizar un acceso con instrumental rotatorio o de ultrasonido desde la pared lateral del maxilar superior, accediendo a la cavidad sin perforar la membrana. De manera cuidadosa, se procede a la desinserción de la membrana de Schneider, creando el espacio necesario para la colocación del material óseo de sustitución para, posteriormente, colocar los implantes en la posición y de la longitud deseada.
Técnica Indirecta o Transalveolar
También se puede hacer la elevación del seno desde la cresta ósea, a través de la perforación realizada para la colocación de los implantes. Esta es una técnica que a simple vista pudiera parecer más sencilla, pero por el contrario, es más técnico-dependiente y requiere de mayor habilidad.
Aunque es mucho menos invasiva, esta es una técnica en la que la intervención se realiza a ciegas, lo que aumenta el riesgo de perforar la membrana.
Injertos y Materiales de Relleno
Existen varias posibilidades. Aunque se pueden utilizar bloques óseos del propio paciente obtenidos de otras zonas donantes como la rama mandibular, el mentón, la cresta ilíaca o la calota craneal; en DENTAL VIP siempre usamos rellenos osteoinductores artificiales para este tipo de procedimiento.
Consideramos que los Implantes Cigomáticos y Pterigoideos son siempre una mejor alternativa en los casos extremos, ya que evitan las heridas corporales múltiples, los largos tiempos de espera y las altas probabilidades de rechazo de ese tipo de autoinjertos.
Plasma Rico en Fibrina (PRF)
La aplicación de PRF es una técnica innovadora que se usa en Odontología y muchas Especialidades Médicas para regenerar los tejidos y favorecer una curación más rápida y con menores riesgos de infección. Las plaquetas contenidas en el plasma rico en fibrina liberan factores de crecimiento que optimizan el proceso de regeneración y cicatrización tisular.
En DENTAL VIP nos ha dado muy buenos resultados, y siempre agregamos este concentrado biológico obtenido de la propia sangre del paciente, al material artificial de relleno que se coloca sobre el piso del seno maxilar.
¿Qué Implica una Cirugía de Elevación del Seno?
Como todo acto quirúrgico, un buen diagnóstico, mucha planificación, un correcto protocolo preoperatorio, asepsia y la participación de un Cirujano Oral verdaderamente experimentado.
Por lo general, el procedimiento se planifica en base a una Cone Beam o Tomografía Volumétrica del maxilar superior. Por supuesto, se indican todos los estudios preoperatorios básicos como perfil de coagulación, glicemia, HIV y VDRL.
La técnica a aplicar durante la intervención se determina en base a las características anatómicas del caso y la cantidad de tejido óseo remanente. Usualmente, se ejecutan con anestesia local y se reserva la técnica lateral para aquellos pacientes con muy poco hueso, y que deberán esperar luego entre 6 y 9 meses para recibir sus implantes. La técnica indirecta es la que practicamos con mayor frecuencia, y se ejecuta conjuntamente con la colocación de los implantes dentales.
Luego de la cirugía, se repasan nuevamente las indicaciones postoperatorias de rutina, la medicación y algunas medidas especiales. Siempre será necesario ingerir antibióticos, analgésicos y antiinflamatorios. Como norma, suelen indicarse 7 días de reposo.
Dentro de las medidas especiales, encontramos todas aquellas asociadas única y exclusivamente a los procedimientos del seno maxilar:
1- Evitar Sonarse la Nariz, Estornudar o “Destaparse” los Oídos
Durante un período de al menos 15 días. Si es inevitable el estornudo, hacerlo entonces con total libertad, con la boca abierta y sin obstruir ni oponer resistencia a la presión que genera la expulsión del aire. Jamás intentar la maniobra de Valsalva, que es típica para destaparse los oídos y que consiste en tratar de exhalar aire con la boca y la nariz cerradas.
Cualquiera de estas acciones podría causar una comunicación buco-sinusal, una complicación bastante grave y difícil de resolver.
2- Evitar Bucear o Sumergir la Cabeza Debajo del Agua
También, durante un período de al menos 15 días. Evitar además cualquier actividad o ejercicio intenso que pueda producir un aumento de la presión intrasinusal.
3- Usar Afrin® o Cualquier Otro Descongestionante Nasal
En gotas o spray, cada 12 horas durante los primeros 7 días, para mantener la vía aérea permeable y facilitar el drenaje postquirúrgico de la cavidad intervenida.
4- Tomar el Antihistamínico Recetado
Por un período de 15 días, pero solo si ha sido indicado.
5- No Viajar en Avión Durante al Menos 10 Días
Ya que los cambios de presión en el ascenso y descenso de la aeronave, podrían afectar la integridad y estabilidad de la membrana sinusal.
“En Muchos Casos, la Cirugía de Elevación del Seno Maxilar, Es un Procedimiento Imprescindible para la Colocación de Implantes en el Maxilar Superior”.
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