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Por lo general, el bruxismo consiste en una actividad oral inconsciente, involuntaria, repetitiva y sin propósito funcional; caracterizada por apretar o rechinar los dientes. El trastorno es heterogéneo y básicamente contempla dos modalidades: el bruxismo diurno y el bruxismo nocturno.
El bruxismo diurno surge de una variedad de condiciones psicológicas, neurológicas y bucodentales. El bruxismo nocturno puede suceder durante todas las etapas del sueño, en particular el sueño ligero.
Es importante reconocer y controlar este hábito, debido a que las fuerzas extremadamente poderosas que ejerce sobre los dientes, las estructuras periodontales, las articulaciones temporomandibulares y los músculos masticatorios; son capaces de producir desgaste, degeneración y dolor a nivel de la cabeza y diversos componentes del sistema masticatorio.
La prevalencia estimada del bruxismo oscila entre el 8% y el 31% de la población adulta, y algunas investigaciones afirman que afecta a las mujeres con mayor frecuencia, debido a que son más sensibles emocionalmente y susceptibles al estrés. Si el hábito de apretar o rechinar los dientes no se detecta, intercepta o trata a tiempo, puede conducir a la destrucción total de la dentición, con graves consecuencias estéticas y funcionales para la persona.
Signos y Síntomas del Bruxismo
Los síntomas del bruxismo pueden parecerse y confundirse con los de otras afecciones o problemas de salud. Acuda a consulta con su Odontólogo de confianza si siente u observa algo de lo siguiente:
- Tensión frecuente en los músculos del cuello, la cara o la mandíbula.
- Dolor de cabeza sin causa aparente o diagnóstico definido.
- Dolor facial.
- Clicks o chasquidos en la articulación temporomandibular (ATM).
- Bloqueo o luxación mandibular.
- Sensibilidad en dientes y encías.
- Desgaste dental excesivo.
- Dientes astillados o agrietados.
- Fractura frecuente de prótesis y restauraciones.
¿Cuáles Son Sus Causas?
Se considera que el bruxismo y el rechinamiento tienen una etiología multifactorial. Se han asociado con factores periféricos como interferencias dentarias o desarmonías oclusales (en la mordida) e influencias psicosociales como el estrés o la ansiedad, y causas centrales o fisiopatológicas que involucran los neurotransmisores centrales y otras estructuras cerebrales.
Los Especialistas en Gnatología a menudo señalan el exceso de estrés y ciertos tipos de personalidad, como las causas del bruxismo, ya que a menudo afecta a personas con gran tensión nerviosa como ira, dolor o frustración. También afecta a personas con tendencias agresivas, apresuradas o demasiado competitivas. Existen pruebas de que, en algunas personas, el bruxismo es causado por un desequilibrio en los neurotransmisores cerebrales. Además, algunos medicamentos, como los antidepresivos fluoxetina y paroxetina; pueden causar bruxismo.
¿Cómo Se Diagnostica el Bruxismo?
Durante las visitas regulares al consultorio, su Odontólogo revisará los dientes en busca de signos de bruxismo, como las típicas facetas de desgaste. Si observa alguno, con seguridad examinará la articulación temporomandibular y le interrogará acerca de otros síntomas frecuentes, como dolor de cabeza o de la musculatura facial.
Si hay dudas acerca del diagnóstico, probablemente su caso sea puesto en observación, o referido con algún Especialista en la materia.
Tratamientos Actuales Para el Hábito de Apretar y Rechinar los Dientes
El bruxismo es altamente tratable, particularmente si es detectado a tiempo. La clave está en descubrir cuál es su causa y luego enfocar el tratamiento hacia ella. Sin embargo, los procedimientos clínicos más comunes o frecuentemente involucrados en el tratamiento de este hábito parafuncional, son los siguientes:
1- Cuidados Personales
Si ya sabe que padece el hábito y tiene sintomatología, practique las siguientes recomendaciones para aliviarla:
- No mastique chicle. Esto puede empeorar el dolor.
- Evite los caramelos duros, nueces, carnes gruesas y otros alimentos que sean difíciles de masticar.
- Intente relajar su rostro durante el día. Los automasajes suelen ser de utilidad. Para ello, busque identificar los nódulos pequeños y dolorosos llamados puntos gatillo, que pueden activar el dolor en la cabeza y la cara.
- Maneje el estrés. Haga todo lo posible por reducirlo, ya que el estrés y la ansiedad empeoran el bruxismo. Métase en un jacuzzi, salga a caminar o escuche su música favorita. Aprenda ejercicios de relajación como mindfulness, respiración profunda o meditación.
- Cambie su postura. Hable con su Odontólogo sobre las técnicas para adoptar una posición adecuada de la boca y la mandíbula.
- Si tiende a apretar mientras duerme, no consuma alimentos o bebidas que contengan cafeína antes de acostarse. El alcohol y el cigarrillo por las noches, también pueden empeorar el bruxismo.
- Manténgase al día en su cuidado dental, para que su Odontólogo pueda monitorear cualquier posible daño sobre sus dientes, encías o articulaciones.
- Duerma lo suficiente.
2- Férulas y Protectores Bucales
Si Usted es una máquina nocturna de moler, es indispensable que utilice de rutina una férula para dormir. Algunas encajan sobre los dientes superiores y otras sobre los inferiores. Pueden ser diseñadas para mantener la mandíbula en una posición más relajada o para estimular alguna otra función.
Uno de estos protectores llamado NTI-tss, por ejemplo, se coloca solo sobre los dientes frontales para mantener los dientes posteriores (molares) completamente separados durante el sueño. Esto se basa en la teoría de que la mayoría de las tensiones resultantes del apretamiento, se acumulan sobre los dientes posteriores. Con el NTI, el único contacto es entre la férula y los dientes anteroinferiores. Muchos estudios han demostrado que la férula NTI-tss ayuda a prevenir o aliviar el bruxismo.
Aún así, el tipo de protector más utilizado, continúa siendo la férula ortostática de recubrimiento total superior.
3- Psicoterapia y Relajación
Cuando el estrés crónico o la ansiedad producen el hábito de apretar y rechinar los dientes, puede ser muy útil consultar a un terapeuta. Una vez que haya abordado los problemas que están causando su angustia emocional, es posible que el bruxismo disminuya.
Si estos esfuerzos fracasan en el objetivo de interrumpir el hábito del bruxismo, vale la pena intentar el biofeedback. Este es un método que utiliza procedimientos y equipos de vigilancia para enseñarle a controlar la actividad de sus músculos masticatorios.
También, cualquier otra actividad que sea de su agrado, que le haga sentir mejor y ayude a drenar el estrés acumulado, será útil en el tratamiento del hábito. La práctica deportiva, técnicas de respiración profunda, masajes, meditación, tai chi, yoga, musicoterapia, bailoterapia, aromaterapia y terapia del arte; suelen ser hobbies muy relajantes y favorables desde el punto de vista emocional.
4- Tratamiento Farmacológico
Hay mucha evidencia de que ciertos medicamentos pueden ser útiles en el manejo del bruxismo. Los relajantes musculares, e incluso las inyecciones de botox, han demostrado ser prometedores antídotos temporales para el hábito, siempre y cuando no sea producido por otros medicamentos.
Si su bruxismo es causado por fármacos, su Médico podrá considerar ajustar la dosis o recetarle un medicamento diferente.
5- Ajuste Oclusal
El ajuste oclusal o de mordida es un procedimiento que se ejecuta para eliminar las pequeñas interferencias y contactos prematuros que impiden que los dientes engranen correctamente. Las interferencias oclusales pueden evitar que la mandíbula se acomode en su posición anatómica correcta y, a veces, pueden desarrollar bruxismo. Esto implica que los músculos de la mandíbula y el cuello nunca puedan relajarse por completo, lo que genera espasmos y fuertes dolores de cabeza, cara y cuello.
Las interferencias pueden desarrollarse por el propio proceso de erupción dental, pueden ocurrir después de un accidente, por la pérdida de dientes que nunca son repuestos o pueden ser consecuencia del desgaste funcional. Las restauraciones dentales como obturaciones, coronas y puentes mal ajustados o sobrecontorneados; también pueden causar interferencias.
6- Rehabilitación Oral
Si su hábito de bruxismo no pudo ser controlado a tiempo y sus dientes se han roto o desgastado excesivamente, será necesario rehabilitarlos para recuperar la función masticatoria y la apariencia de la sonrisa.
Los enfoques terapéuticos para pacientes con bruxismo severo y dentición desgastada pueden incluir las indicaciones de restauraciones directas e indirectas con composites, oro, aleaciones metálicas y porcelanas; para confeccionar inlays, onlays (incrustaciones) o coronas de recubrimiento total.
En los casos extremos, el tratamiento protésico tradicional incluirá la preparación de los dientes (endodoncias, pernos y tallado de muñones) para recibir coronas completas, ya que es la única manera de recuperar la dimensión vertical oclusal, estética y función masticatoria. En estas situaciones, las coronas de porcelana fundida sobre metal, continúan siendo la primera opción restauradora.
“Los Grandes Desgastes Dentales Ocasionados por el Bruxismo No Tratado, Suelen Ser Indicación Para una Reconstrucción o Rehabilitación Oral Completa”.
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