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El mal aliento es algo que nos afecta a todos en algún momento de nuestras vidas. También se conoce como halitosis o fetor oris, y se define como el conjunto de olores desagradables que emanan de la boca.
Dichos olores pueden provenir de las encías, los dientes, la lengua, las mucosas o como resultado de un problema de salud subyacente, y pueden ser una afección temporal o crónica. Según la Asociación Dental Americana, al menos el 50 por ciento de los adultos ha tenido halitosis en su vida y 1 de cada 4 personas la padece constantemente.
Una característica muy particular de esta condición es que se vuelve difícil de detectar por parte de la persona que la padece. En general, son los demás los que perciben el olor, bajo el completo desconocimiento de la persona afectada. Por lo tanto, pueden pasar meses, o incluso años, antes de que alguien se arme de valor y le advierta de la situación.
Lo más recomendable, para enterarse a tiempo del mal aliento en caso de sospecha y evitar ser el centro de burlas y malos comentarios, es solicitar la colaboración sincera de alguien en quien confíe absolutamente. Sin embargo, debe ser Usted el que pregunte, y no esperar a que el otro tome la iniciativa. Aunque también es difícil de percibir, el mal aliento suele ir acompañado de un leve pero constante mal sabor de boca. ¡Esa puede ser una buena pista!
La halitosis puede causar un malestar psicológico importante y es la tercera causa más común por la que las personas buscan atención dental, después de las caries y las enfermedades de las encías.
Los remedios caseros simples y los cambios en el estilo de vida, como una mejor higiene oral y dejar de fumar, a menudo pueden acabar con el problema. Sin embargo, si el mal aliento persiste, lo recomendable es visitar a un profesional para determinar las causas subyacentes.
Potenciales Causas de Halitosis
Sin duda, la razón más común del mal aliento son las deficiencias de higiene oral.
El cepillado y el hilo dental garantizan la eliminación de las pequeñas partículas de comida que puedan acumularse y descomponerse lentamente, produciendo olor. Una masa de bacterias llamada placa dental se acumula si el cepillado no es regular. Esta placa puede irritar las encías y causar una infección llamada periodontitis. Las dentaduras postizas que no se limpian con regularidad o de manera adecuada también pueden albergar bacterias que causan halitosis.
Sin embargo, otras situaciones como las siguientes, también podrían ser la causa:
- Tabaco Los productos del tabaco causan sus propios tipos de olor en la boca. Además, aumentan las probabilidades de enfermedad en las encías que también puede causar mal aliento.
- Alimentos La descomposición de las partículas de alimentos atascadas en los dientes puede provocar muy malos olores. Algunos alimentos como la cebolla y el ajo también pueden provocar mal aliento. Una vez digeridos, sus productos de degradación se transportan por la sangre hacia los pulmones, desde donde pueden ser exhalados a través de la respiración.
- Resequedad Bucal La saliva es un limpiador natural de la boca. Si la boca está permanentemente seca debido a alguna enfermedad o condición específica, como la xerostomía, pueden acumularse los olores.
- Dietas Estrictas Los programas de ayuno y de alimentación bajos en carbohidratos pueden producir halitosis. Esto se debe a que la descomposición de las grasas produce unas sustancias químicas llamadas cetonas. Estas cetonas poseen un aroma bastante fuerte y particular.
- Medicamentos Ciertos medicamentos pueden limitar la cantidad de saliva y potenciar los olores. Otras drogas pueden producir olores a medida que se descomponen y liberan sustancias químicas a través del aliento. Algunos ejemplos incluyen los nitratos que se usan para tratar la angina de pecho, ciertos quimioterápicos y algunos tranquilizantes como las fenotiazinas. Las personas que toman suplementos vitamínicos en grandes cantidades, también pueden ser propensas al mal aliento.
- Afecciones de Boca, Nariz y Garganta A veces, se pueden formar pequeños cálculos bacterianos en las amígdalas y producir mal olor. Además, las inflamaciones e infecciones de la nariz, la garganta y los senos paranasales; pueden provocar halitosis.
- Cuerpos Extraños El mal aliento puede ser causado por la retención de un cuerpo extraño en la cavidad nasal de una persona, situación algo frecuente en los niños.
- Enfermedad Periodontal La enfermedad periodontal ocurre cuando no se elimina la placa de los dientes con regularidad. Con el tiempo, la placa se endurece y se convierte en sarro. El sarro no se puede eliminar con el cepillado y puede irritar las encías. Además, puede causar la formación de bolsas o sacos patológicos en el área comprendida entre los dientes y las encías. Los alimentos, las bacterias y la placa dental pueden acumularse en las bolsas y causar un fuerte olor.
- Enfermedades Sistémicas Crónicas Algunos cánceres, la insuficiencia hepática y otras enfermedades metabólicas pueden causar halitosis, debido a la gran cantidad de sustancias químicas que producen. La enfermedad por reflujo gastroesofágico puede causar mal aliento debido a la regurgitación frecuente de ácidos estomacales.
- Cetoacidosis Cuando los niveles de insulina de una persona con diabetes son muy bajos, su cuerpo ya no puede metabolizar azúcares y comienzan a usar los depósitos de grasa. Cuando se descompone la grasa, se producen y acumulan cetonas. Las cetonas pueden ser venenosas cuando se concentran en grandes cantidades y producen un olor típico y desagradable en el aliento. La cetoacidosis es una afección grave y potencialmente mortal.
- Obstrucción Intestinal Las exhalaciones respiratorias pueden oler muy mal si ha habido un período prolongado de vómitos, algo típico en una obstrucción intestinal.
- Bronquiectasia Es una afección crónica en la que las vías respiratorias se ensanchan más de lo normal, lo que estimula la acumulación de moco que produce mal aliento.
- Neumonía por Aspiración Inflamación o infección de los pulmones y vías respiratorias debido a la aspiración de alimentos, vómito, saliva u otros líquidos.
¡Cómo Afrontar el Problema!
Lo más lógico es empezar por aplicar las medidas más sencillas y eficaces para la gran mayoría de casos. Mejorar las técnicas de higiene oral, practicar algunas restricciones dietéticas, eliminar los hábitos desfavorables y acentuar el cuidado dental profesional; suelen acabar con el problema del mal aliento en más del 90% de los pacientes.
Estos son los 10 principales consejos al respecto:
1- Cepillarse y Usar el Hilo Dental con Mayor Frecuencia
La placa, esa desagradable acumulación pegajosa en los dientes, acumula las bacterias que causan el mal aliento. La comida atrapada también agrava el problema.
Recomendamos cepillarse los dientes por lo menos dos o tres veces al día, y usar el hilo dental al menos una vez. Si le preocupa su aliento, practique ambas cosas un poco más a menudo. Sin embargo, no exagere. Si se cepilla con demasiada fuerza, puede desgastar sus dientes, haciéndolos vulnerables a las caries.
2- Limpiar las Prótesis y Dentaduras Postizas
Todo elemento artificial que se use en boca, incluidas las dentaduras postizas, los puentes fijos, aparatos de ortodoncia y protectores bucales; deben limpiarse como se recomienda a diario. La buena higiene evita que las bacterias se adhieran y acumulen en estos dispositivos. Cambiar el cepillo de dientes cada 2 o 3 meses también es importante para mantener la eficacia de la técnica.
3- Enjuagar Su Boca
Además de refrescar su aliento, un buen enjuague bucal suma protección adicional al eliminar las bacterias. Un sabor a menta fresca puede hacerle sentir bien, pero asegúrese de que el enjuague bucal que elija de verdad elimine los gérmenes que causan el mal aliento. No se limite solo a disfrazar el olor. Enjuáguese diariamente con el enjuague prescrito por su Odontólogo y combata verdaderamente la causa de su halitosis.
También puede ayudar el hacer buches con agua corriente después de comer, ya que eliminan los residuos de comida que suelen quedar atrapados entre los dientes.
4- Raspar Su Lengua
Los surcos y fisuras de la lengua, suelen alojar gran cantidad de bacterias malolientes. Para deshacerse de ellas, cepille suavemente su lengua con su cepillo de dientes.
Si su cepillo es demasiado grande para llegar cómodamente a la parte posterior de la misma, pruebe con un raspador especial. Están diseñados específicamente para aplicar una presión uniforme en la superficie del área de la lengua y eliminar las bacterias, los restos de alimentos y las células muertas que el cepillo no puede eliminar.
5- Evitar Ciertos Alimentos
Las cebollas y los ajos son grandes enemigos, y cepillarse los dientes después de ingerirlos casi no ayuda. Las sustancias que causan sus malos olores llegan al torrente sanguíneo y viajan a los pulmones, desde donde son exhaladas.
¿La mejor forma de resolver el problema? No los coma, o al menos evítelos antes de ir a trabajar o ver a sus amigos.
6- Dejar de Fumar
Además de causar cáncer, fumar puede dañar sus encías, manchar sus dientes y producirle mal aliento.
Los parches de nicotina de venta libre pueden ayudar a controlar el hábito. Si necesita un poco más de ayuda, programe una cita con su Médico de cabecera para conversar sobre los programas antitabaco y los medicamentos de prescripción que podrían ayudarle a dejar el cigarrillo para siempre.
7- Masticar Chicle Sin Azúcar
Las bacterias de su boca aman el azúcar porque la usan para producir ácidos. Esto desgasta los dientes y provoca mal aliento. En su lugar, mastique chicle sin azúcar.
El chicle estimula la secreción de saliva, que es el mecanismo natural de defensa de la boca contra los ácidos de la placa, que provocan la caries y el mal aliento.
8- Mantener Sus Encías Sanas
La enfermedad de las encías produce mal aliento. Las bacterias se acumulan en las bolsas periodontales y generan muy mal olor. Si sabe que tiene o padece una enfermedad periodontal, debe esforzarse en la higiene oral y visitar a su Periodoncista con mayor frecuencia, para mantener un mejor control sobre la misma.
9- Humedecer Su boca
Puede padecer de caries y mal aliento si no produce saliva suficiente. Si tiene la boca seca, beba mucha agua durante el día.
Mastique chicle o chupe caramelos duros sin azúcar. Pruebe también un humidificador por la noche, para humedecer el aire de su habitación.
10- Visitar a Su Odontólogo
Si su mal aliento continúa a pesar de sus mejores esfuerzos, programe una cita con su Odontólogo de confianza. Solo él podrá determinar con exactitud si la causa de su mal aliento es de origen oral, y podrá elaborar un plan de tratamiento personalizado que incluya limpiezas profundas de sus dientes y encías, enseñanza y supervisión de técnicas adecuadas de higiene oral y controles profesionales periódicos que garanticen la durabilidad de los resultados.
“Sin Duda, las Razones Más Frecuentes del Mal Aliento Son las Deficiencias de Higiene Oral, Acumulación Excesiva de Placa Bacteriana y Presencia de Cálculo Dental”.
DENTAL TIP
Tratamiento Profesional
Ya sabemos que el mejor método para reducir la halitosis es una buena higiene oral. Esto ayuda a prevenir caries y reduce la probabilidad de padecer una enfermedad de las encías.
Se recomienda que las personas visiten al Odontólogo para un chequeo y limpieza profesional dos veces al año. El profesional podrá recomendar una pasta de dientes especial o un enjuague bucal antibacteriano. De igual forma, si hay enfermedad de las encías, podrán ser necesarias limpiezas profesionales frecuentes para eliminar la acumulación de bacterias en las bolsas periodontales o sacos patológicos.
Si por el contrario, su Odontólogo comprueba que todo en su boca está bien y que no hay nada en ella capaz de producir mal olor, seguro que le referirá con un Medico Internista para que diagnostique y trate cualquier enfermedad o afección sistémica responsable del problema.
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